miércoles

Hiperacusia: la intolerancia ante ruidos cotidianos

¿Te imaginas que sintieras dolor en tu oído al oír crujir las hojas de los árboles? ¿que no pudieras soportar el zumbido del motor de la nevera? ¿o el ruido del motor de tu coche? Eso es lo que les ocurre a las personas que padecen hiperacusia, un trastorno que se traduce en menor tolerancia a determinados sonidos ambientales.

Se trata de un problema poco habitual y sobre el que hay escaso conocimiento. Sin embargo, puede implicar un grave deterioro en la calidad de vida de los afectados. Las personas con hiperacusia pueden sentir molestias, dolor o incluso pánico ante determinados ruidos. También puede provocarles irritación, aislamiento o depresión.

La hiperacusia está relacionada con el rango dinámico del oído, que es lo que condiciona nuestra reacción ante cambios rápidos de sonoridad.  Asimismo, suele ir acompañada de tinnitus o zumbidos en el oído.  En un estudio de la unidad de Otorrinolaringología del del Hospital de Alarcón en Madrid,  se detectó que el 63% de personas con tinnitus padecían también hiperacusia.

No existe tratamiento médico o quirúrgico para combatir la hiperacusia. Afortunadamente, sí existen terapias auditivas  en las que, con ayuda de un generador de ruido, se  "entrena" el centro para que aprenda a adaptarse a los ruidos normales.

1 comentario:

  1. Yo no soporto la música por más de dos minutos. Casi nunca la escucho. Me harta. No sabía que era algo raro.

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